Residencia Geroplan El Encinar

Quería dejar plasmada mi opinión de ésta residencia, pues visto lo que hay y sale en informativos, siempre por malas prácticas, no me parece justo meter a todas las residencias en el mismo saco. Mi experiencia en la misma, ha sido de poco más de un año, pero he podido vivir con todo el equipo humano que lo forman con todo el cariño y trato de confianza. Se vive la vocación que tienen la mayoría del personal, siempre hay algún garbanzo negro...pero en qué profesión no lo hay. A pesar de todo, quiero destacar la dedicación a nuestros mayores en todos los niveles, hasta ahora y antes de vivirlo, mi opinión era que se sacaba número y hasta que llegase el momento de despedirse de éste mundo, cosa que no he tenido en mi pensamiento nunca en el transcurso del año de experiencia con mi madre. También me ha sorprendido muy gratamente la limpieza de todas las instalaciones, así como el trato familiar y agradable de las personas de administración. Quiero agradecerles con todo mi cariño lo que hacen por los residentes, la dedicación, la humanidad, los festejos que preparan para que salgan de la rutina pero sobre todo el buen ambiente y abierto para todo el que quiera participar. Y ya sin más dilación me despido con un fuertísimo abrazo para todo ese equipo humano que no me canso de nombrar porque se lo merecen. El servicio de médico y enfermeras es de sobresaliente, siempre pendientes de sus residentes para las curas, la medicación y con esos abrazos que curan más que los medicamentos ( Silvia, Arantxa,Sandra,Paloma) Rosa ( directora) , Marta ( gobernanta) Bea ( asistente social) Belén ( sicóloga) Andrés ( fisioterapeuta) y todos los auxiliares que he tenido el gusto de conocer, a pesar de que pasa cómo en todas partes, faltan recursos de las administraciones centrales para paliar las carencias de materiales, reformas de mejora y por supuesto falta de personal. Con el personal de cocina no he tenido relación directa, pero doy fé de que las comidas son muy aceptables y condicionadas a cada residente por sus necesidades. Creo que seguiré en contacto con éste gran equipo para aportar positivamente lo que se pueda. Los voluntarios también somos bien venidos. Hasta pronto y si alguna vez necesito de vuestros servicios, espero encontrar a personas tan humanas y entregadas cómo vosotr@s. Hasta siempre... María José García

Mi experiencia acerca de este centro es todo para bien. Por parte del equipo directivo, Rosa la directora una resina muy simpática y siempre dispuesta a atender cualquier cosa. Marta la gobernanta más de lo mismo siempre con una sonrisa en la cara, muy cercana a todos los usuarios. Andrés, Eva, Belen y Bea personas encantadoras siempre tratando que los usuarios tengan momentos divertidos, se entretengan… Auxiliares, siempre hay una oveja negra, pero como en toda profesión creo yo, Rosa, una persona espectacular, siempre al tanto de todo y dispuesta a ayudar con lo que sea, Juliana, más de lo mismo siempre tratando que los abuelos estén a gusto y tratar de sacarles una sonrisa, tanto ellas como Alberto, Rabi, Vanessa, Miriam, Rosi… Mas de la mitad la verdad que encantadores. A cerca del centro no tengo más que decir que me parece que es el sitio perfecto para nuestros mayores, teniendo en cuenta lo bien que están cuidados y el amor con el que se les trata, las instalaciones genial, nunca hemos tenido un problema con ello, de verdad, más que agradecida por tanto. Muchas gracias❤️.

Desde este pequeño foro aprovecho para agradecer a todo el equipo de la Residencia Geroplan El Encinar, sin excluir a nadie, su trabajo diario por el cuidado y preocupación por mi madre, Antonia García López. Sin duda seguimos pensando que es el mejor lugar para ella dadas nuestras circunstancias. A nivel personal tenemos la tranquilidad de que si hay algún problema más grave de salud va a ser atendida de inmediato, de hecho ha ocurrido así. Sin más, de nuevo gracias por todo vuestro duro trabajo. Un saludo

P.3. TRATO A LAS ALUMNAS DE PRÁCTICAS: Estas personas no nos han tenido en cuenta más que para su propio beneficio. Nos han excluido, acusado falsamente y despreciado. No nos han enseñado absolutamente nada, salvo la forma en la que NO hay que tratar a personas vulnerables. La directora jamás se presentó ante nosotras. Hemos sabido su nombre de milagro. En lugar de observar lo que ocurre en el centro, va diciendo a otros trabajadores que "cuando sube a planta las alumnas están sin hacer nada", lo cual es falso. Se dedica a pasearse y a enseñar su ropa, en lugar de interesarse por el bienestar de los residentes. TRABAJADORES QUE SE SALVAN: Lo más triste de todo son los pocos trabajadores que se salvan y a los que, por supuesto, quiero agradecer por cómo nos han tratado, cuidado, atendido y enseñado. Rabi, Lola, Vanesa, Alberto, Rafa e Isa. Estas personas sí muestran humanidad, respeto y vocación, y sin ellos nuestras prácticas y la vida de los usuarios sería mucho peor. Ojalá sigan ahí siempre. Ya para terminar quería decir que la mayoría de los usuarios de la primera planta (plena consciencia) y algunos del centro de día (a los que solo veíamos unos minutos al día) nos han dicho que están descontentos con el trato del personal. A nosotras, en cambio, nos han agradecido el respeto y el cariño con que los tratamos. Creo que el hecho de que en tan solo tres meses nosotras nos hayamos ganado un cariño inmenso por parte de todos los usuarios y que confíen en nosotras para quejarse de los tratos, deja mucho que desear con como son los trabajadores. Esta residencia no cuida: esta residencia daña. Si queréis a vuestros mayores, no los dejéis aquí.

P.2. NEGLIGENCIA Y ABANDONO: DAVID trata bien a los usuarios, pero no para de tontear con las alumnas en prácticas y ha hecho comentarios sexuales sobre nosotras. ANDRÉS Y EVA dejaron a varios usuarios solos en el gimnasio con material peligroso el 25 de abril de 2025, sobre las 11:45–12:00. Tanto Marta (tutora de prácticas y gobernanta) como la directora están al tanto. Ese mismo día, durante una fiesta, nos dejaron toda la responsabilidad de vigilar a los usuarios, sin supervisión. En el tratamiento de piojos se usó champú antipiojos sin liendrera y se llegó a echar alcohol de manos en el pelo, algo totalmente inapropiado; no se aislaron a los usuarios que los tenían. Con los casos de sarna tampoco se aisló a los usuarios afectados en la planta 1 ni se avisó a los residentes, que se enteraron por otras personas. COMIDAS Y CONDICIONES HIGIÉNICAS: Los menús son muy repetitivos y poco apetecibles. Los desayunos para los usuarios que no pueden masticar son siempre iguales. Los purés apenas varían; habremos visto unos tres distintos durante meses y los propios usuarios nos han llegado a decir que están asquerosos. Se obliga a muchos residentes a comer a la fuerza, sin respetar sus ritmos. Esto ha provocado vómitos y ansiedad. PÉRDIDAS DE AUTONOMÍA Y DIGNIDAD: A todos los usuarios se les quita independencia y autonomía constantemente, tratándolos como si no pudieran hacer nada por sí mismos, solo porque van con prisas. En cuanto a esto, la excusa que dan es que son pocos trabajadores para tantos usuarios, y ahí llevan razón. Quizá, en lugar de seguir acogiendo usuarios a los que solo ven como una forma de ganar dinero, tendrían que empezar a derivarles a otras residencias donde el trato seguro que es mil veces mejor. Porque aunque la solución rápida sería contratar gente, viendo como es la residencia y el horror que hemos vivido, no me extraña que nadie quiera trabajar ahí. Lo que más rabia nos ha dado ha sido la colocación de los usuarios en plantas incorrectas. El caso más grave: un residente completamente consciente, que come y bebe solo (aunque no le dejan, gracias a nosotras ha recuperado cierta autonomía), colabora en el vestido y conversa con claridad, fue subido de la planta 1 (ayuda mínima) a la planta 3 (donde hay personas completamente dependientes e incluso en paliativos), solo para hacer hueco en la planta 1. Una decisión injusta e inhumana que atenta contra su dignidad y autonomía, de la cual él es plenamente consciente y nos ha dicho en más de una ocasión que no quiere estar ahí, una decisión que incluso sus compañeros de la planta 1 han juzgado y recriminado, porque lo que le han hecho a este usuario no es ni medio normal.

Gracias, en nombre de mi madre, Esmeralda Ordoñez, a todo el equipo de profesionales de la Residencia Geroplan, Amavir El Encinar, por sus cuidados, atenciones, trato, saber hacer y humanidad. La recomiendo de una manera muy especial. Habéis hecho feliz a mi madre durante los siete años que ha permanecido allí. Mil gracias otra vez.

Malísima residencia los abuelos tienen varias caídas seguidas y la familia piden sujeción y las da igual que se caiga una vez como vente siguen sin poner un simple cinturón para que no se caigan los abuelos prefieren que se caigan las veces que sea pero van de progresistas y avanzados espero que algún familiar de ellas sufra lo mismo.que mi madre dan mal la medicacion mal el sintron tenian un medico que no lo sabia hacer y lo contrataron sabiendo que nunca lo habia hecho y el medico lo hizo mal y tubieron que deribarla a mi madre al hospital.porque tenia un valor del sintron de 8 y tenia que tener 2 y lo peor esque ellas saben lo que pasa y las da igual